sábado, 23 de agosto de 2025

MINERÍA: ¡NO DEJEMOS PASAR ESTA GRAN OPORTUNIDAD!

 

Por: Enrique Soto Roca (*)

Un nuevo boom en la Industria Minera, que podría ser un nuevo superciclo -superior al que tuvimos en la década del 2003 y 2012- estaría a punto de suceder en nuestro país; debido a la crecida abrumadora de los precios de los minerales estratégicos, generada por una gran demanda en el mercado global, que necesita urgente los commodities para garantizar de manera efectiva la transición energética y la electromovilidad, que permitirán la descarbonización del planeta. Disminuyendo ostensiblemente el calentamiento global que amenaza nuestra existencia. Sin embargo -sostenemos con mucha preocupación-, nuestras autoridades gubernamentales, no hacen nada considerable, de manera oportuna, para lograr que esto suceda, corriéndose el grave riesgo, que no se logre materializar esta brillante oportunidad que nos ofrece la coyuntura del mercado internacional, dejándola pasar irresponsablemente; para después sumergirnos en una letanía de lamentación, por nuestra incompetencia e incapacidad. Teniéndose en consideración que la Industria Minera en el Perú es uno de los principales motores de la locomotora que garantiza el arrastre del crecimiento económico en el país.

TENEMOS UN POTENCIAL MINERO ENORME

Debemos tener presente, en un análisis serio, sobre el poder estratégico que tenemos como productores de minerales, líder en el mercado global. El Perú produce 8 de los 17 principales metales críticos que necesita el mundo para la transición energética, como el cobre, oro, plomo, zinc, plata, estaño, hierro y molibdeno. Que los poseemos en reservas considerables en las entrañas de nuestra Cordillera de los Andes.

Como dicen nuestros analistas e investigadores especializados en el quehacer extractivo minero: “El Perú tiene un potencial minero enorme, que debe ser aprovechado poniendo nuevas minas en operación y manteniendo las actuales, calculándose que, en tales circunstancias, generará el Estado un monto aproximado de 500 mil millones de dólares, hasta el año 2050” (Informe Potencial Minero del INGEMMET-11/01/18).

Como podemos darnos cuenta, las proyecciones técnicas de producción de minerales en el país son prometedoras. Augurando un porvenir de crecimiento económico extraordinario, positivo para nuestra nación.

PROMOVER 2 MILLONES DE EMPLEOS

Por otro lado, el Perú cuenta en estos momentos en su Cartera Minera de Inversión, con 67 proyectos, que suman alrededor de 65 mil millones de dólares. Capaces de generar 2 millones de empleos directos e indirectos; que harían crecer el mercado de manera espectacular, promoviendo los ingresos ciudadanos de manera significativa, que permitirían dinamizar el consumo interno considerablemente, elevando la calidad de vida de nuestra población. Sin tener en cuenta que esa inversión referida, podría llegar a los 80 mil millones de dólares, si consideramos la actualización de costos de producción, en las nuevas inversiones. Empezando por la construcción de infraestructura de los yacimientos que entrarían en operación.

El país es una potencia en producción de cobre y oro. Sin embargo, la tenemos frenada, debido a que no nos interesamos en formar suficientes y bien capacitados profesionales en el quehacer minero. Principalmente geólogos, altamente calificados, con conocimientos de alta tecnología moderna, ya que ellos son la vanguardia en la avanzada del sector extractivo, ubicando los depósitos de minerales que serán extraídos; ahora no se encuentran tan fácilmente, como antes que se hallaban a flor de suelo, a menos de cien metros de excavación. Hoy se tiene que hacer perforaciones profundas de más de mil metros, para dar con el tesoro. Recurriendo para ello al auxilio de la tecnología minera moderna, promovida por la Inteligencia Artificial. Es decir, actualmente, la educación, basada en el conocimiento, se ha convertido en imprescindible para avanzar y desarrollar la industria minera, haciéndola competitiva y sostenible.

¡PONER EN PRODUCCIÓN 9 PROYECTOS PARALIZADOS!

Para avanzar en el quehacer minero con aplomo, en el país, es conveniente dinamizar los proyectos. Destrabando muchos de ellos, poniéndolos rápidamente en operación y producción. Teniendo en cuenta que, de los 29 mayores proyectos de cobre paralizados en el mundo, 9 están en el Perú. Siendo algunos de ellos: La Granja, Conga y Michiquillay (Cajamarca); los Chancas (Apurímac); Río Blanco (Piura) y Pampa de Pongo y Tía María (Arequipa). Eso se tiene que superar de manera urgente, para así pretender aprovechar la gran oportunidad que nos está dando el mercado global. Eso significa -dentro de otros obstáculos- disminuir la traba burocrática, que se reflejan en la excesiva tramitología, que se está convirtiendo en una traumatología. Que impide el desarrollo y el progreso de nuestros pueblos.

Trabajemos con ahínco y perseverancia, para que estas iniciativas de inversión privada en el sector minero, sean más operativas bajo un marco competitivo, dentro de una economía eficiente de mercado. Con procesos más agiles y una mayor estabilidad social y política.

HACER CRECER LA INVERSIÓN MINERA

“Hoy el Perú debería estar con una inversión minera de 14,000 millones de dólares. Cercana al 5% del PBI, similar al año 2013, pero en lugar de eso nos mantenemos en 5,000 millones de dólares. Alrededor del 2%”, sostuvo Carlos Gallardo, gerente general del Instituto Peruano de Economía (IPE).

Hay que tener presente que tenemos el oro en máximo histórico de 3,300 dólares la onza Troy. Y el cobre y la plata en tendencia creciente, abriéndose una oportunidad única y trascendental para impulsar el crecimiento económico de nuestro país, que estamos obligados a no dejarla pasar sin sacarle el mayor provecho.

EL ORO PODRÍA ALCANZAR LOS 4,000 DÓLARES LA ONZA

Debido a la creciente demanda de los bancos centrales del mundo por hacerse con el oro, como refugio económico, para defenderse de la incertidumbre económica global, los especialistas, anuncian que el precio del metal precioso, a finales del 2026 llegará a 4,000 dólares la onza Troy.

Por su parte, en los últimos cinco años, la India hizo crecer sus bóvedas de oro que estaban en 650 a 900 TMF. Y Polonia, pasó de tener 225 TMF de oro a 515.

Esas actitudes, de protección gubernamental, hacen pensar a los estudiosos de la evolución de los precios del metal amarillo, que para el año 2030, se especula, que llegará a costar la fabulosa cifra de 8,000 dólares la onza Troy. ¡Una barbaridad!

Sin embargo, nosotros los peruanos tenemos una preocupación grande, debido a que, en el 2024, el país produjo 97 TMF de oro, pero exportó 179. Observándose de fondo una brecha de 82 TMF. Afectándonos considerablemente la recaudación fiscal, que la tenemos alicaída, por debajo del 15% del PBI. Estando obligados a corregir esta tendencia, promoviendo, a toda costa, la formalización minera -principalmente en la Pequeña Minería y Minería Artesanal- y combatiendo -con la ley en la mano- la minería ilegal (léase delincuencial). Es una tarea pendiente en esta legislatura del último año de gestión de este gobierno que debe de resolverse; promulgándose la Ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala. Ley MAPE. Que se ha venido postergando de manera continua en los últimos años. Con esta promulgación, se daría por terminado el Registro Integral de Formalización Minera (REINFO). Cerrándose un ciclo histórico en el quehacer de la Industria minera en el Perú.

(*) Periodista

miércoles, 6 de agosto de 2025

¿QUÉ HACER PARA IMPULSAR LA INDUSTRIA MINERA?

 

Por: Enrique soto Roca (*)

El Perú es un país bendecido; tenemos una potencial Cordillera de los Andes, pletórica de rocas volcánicas y plutónicas, ricas en polimetales. Es dueño, asimismo, de una impresionante estabilidad geológica, que genera admiración en el mercado mundial; siendo reconocidos como uno de los principales líderes de la Industria Minera, teniendo una demanda global asegurada de minerales para las siguientes décadas, que contribuirán a la transición energética y la descarbonizacion del planeta. Sin embargo, esta potencialidad, que nos brinda la madre naturaleza, no la estamos aprovechando como debe ser, optimizando la exploración y explotación de nuestros recursos naturales extractivos; promoviendo la formación de nuevos, expertos y eficientes geólogos. Así como, mejorando los procesos regulatorios, permitiendo que los proyectos avancen sin trabas innecesarias. En un periodo histórico coronado por la gran demanda de minerales y sus altos precios en el mercado internacional. Si no actuamos a tiempo y con la debida premura, solo veremos pasar esta gran oportunidad que nos brinda la coyuntura mundial, para progresar y crecer económicamente, generando el bienestar general a toda nuestra población.

Consideramos una gran responsabilidad, por parte de nuestras autoridades, saber aprovechar este trascendental momento histórico que estamos viviendo, que favorece de manera enorme al sector extractivo de nuestro país; impulsando su desarrollo, expansión y consolidación. Teniendo en consideración que su contribución al erario nacional es estratégica, representando el 40% de las recaudaciones del Impuesto a la Renta empresarial. Asimismo, contribuye con el 15% del Producto Bruto Interno (PBI), constituyendo el 65% del total de nuestras exportaciones anuales. Trayendo divisas. Reconociendo al sector, como la locomotora, que mueve y arrastra a todos los demás sectores económicos -sin pretender disminuir la importancia significativa trascendental de las otras actividades productivas-, generando crecimiento, promoviendo el empleo y estimulando el consumo interno. Garantizando de tal manera, estabilidad económica en el país.

 EXPORTAREMOS 60 MIL MILLONES DE DÓLARES EN MINERALES

Asimismo, se tiene conocimiento, que el Perú exportará este año, 60 mil millones de dólares en minerales. Habiéndose contabilizado ingresos tributarios recaudados por la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (SUNAT), montos, al mes de junio último, de 83,249.6 millones de soles, de los cuales el 13% corresponden a impuestos de actividades de la Industria Minera. (Gestión 23/07/25)

“Los recursos minerales son la columna vertebral de la sociedad moderna. Esta se detiene sin el cobre -sostiene Adam Simon, geólogo y profesor de la universidad norteamericana de Michigan-. Sin embargo, su importancia crucial a menudo se pasa por alto y con frecuencia está ausente de las agendas políticas de las naciones”. Así se explican, los entendidos en la materia, estudiosos e investigadores, la importancia del quehacer minero en el mundo. Considerándola imprescindible para el desarrollo y crecimiento económico global.

INFRAESTRUCTURA PARA EL DESARROLLO MINERO

Teniendo en consideración la importancia y trascendencia de promover el desarrollo y crecimiento de la industria extractiva minera, debemos señalar que una de las acciones a realizar, para generar mayor producción de minerales, de manera sostenida, es la implementación y desarrollo de una adecuada infraestructura, que incluya líneas férreas, carreteras, electrificación, puertos, represas y canales de irrigación. La interconexión, la energía y el agua, son algunos de los factores básicos para sacar adelante a la industria minera. Estando bastante retrasados en este aspecto, nuestro país, por más de tres décadas. Necesitando el Perú una inversión gigantesca que supera los 100 mil millones de dólares. Estando en la necesidad y obligación de hacerlo, de manera urgente, en los próximos años, si queremos desarrollar y salir adelante.

Para lograr avanzar en el desarrollo minero es de suma importancia lograr tener injerencia en la promoción de clústeres económicos. Por ejemplo, la actividad minera debe asociarse, en algún determinado territorio, con la agro-exportación y el turismo. Actividades económicas que, actuando coordinadamente -logrando localizar objetivos comunes- en una misma jurisdicción, mejorarían su quehacer económico, optimizando sus procesos, elevando la productividad y la producción, apoyándose mutuamente, generando líneas maestras de desarrollo conjunto. Tratando de replicarse esas experiencias en otras regiones, del territorio nacional. ¿Qué se espera para implementar esta necesaria articulación? Estando seguros que todos apoyaríamos esta decisión estratégica.

A pesar que la industria minera en el Perú está avanzando y creciendo, aún no se mueve al ritmo de las exigencias del mercado global, teniendo las potencialidades necesarias para lograrlo. ¿Qué pasa? ¿Por qué camina muy lento cuando tiene posibilidades de acelerar el paso? Por tal pesadez, fuimos desplazados, como productores mundiales de cobre del segundo al tercer puesto, por la República Democrática del Congo, hace dos años continuos. Esperamos este año, recuperar el lugar que nos corresponde, e ir más lejos, queriendo que nuestro país sea el primero. Ya que tenemos reservas en abundancia, superiores a las de la competencia. Si nos proponemos de verdad, nosotros podríamos superar en producción a Chile. Ya que estamos ubicados en mejores condiciones geográficas y geológicas, teniendo mayores potencialidades. Estamos obligados a pensar en grande.  Solo es cuestión de ponernos las pilas y afinar nuestra estrategia competitiva. Elevando nuestra producción, siendo más agresivos empresarialmente. Ya que somos un país minero, de manera ancestral, con experiencia y trayectoria de gran alcance, reconocidos mundialmente. Habiendo llegado el momento de sacar y poner de manifiesto todas nuestras capacidades. Siendo eficientes.

67 PROYECTOS POR 64 MIL MILLONES DE DÓLARES

En tal sentido, no nos contentemos con sacar adelante, de manera inmediata, en los próximos tres años, 11 proyectos mineros -como lo anuncia el Ministerio de Energía y Minas (MINEM)- de los 67 proyectos que tenemos actualmente en total en cartera. Ya que es una inversión muy ínfima que no supera los 8,000 millones de dólares, que equivaldría a una inversión anual de menos de 3,000 millones de dólares. Cuando en buenos tiempos la inversión minera privada alcanzaba los 10 mil millones de dólares anuales. A ese monto debemos acercarnos. Debemos ser ambiciosos. Solo así haremos crecer al país. Disminuyendo considerablemente la pobreza, promoviendo el crecimiento de la clase media, que ha sido severamente golpeada en los últimos años.

Debemos proyectarnos optimistamente, de manera realista, hacia el 2030. Con el propósito de ejecutar e implementar el 50% del total de nuestra actual cartera de proyectos mineros, que asciende a 64,100 millones de dólares. Lograr ese objetivo sería un quinquenio extraordinario, que significaría haber creado una plataforma sólida y sostenida, para dar paso a un crecimiento acelerado en los próximos quinquenios, con una proyección estratégica hacia el 2050. Donde la demanda del cobre -para ese entonces- va hacer abismal en el mundo. Calculándose -según especialistas- que se necesitarían 91 millones de toneladas de cobre, para ese momento, para lograr el objetivo de cero emisiones de carbono en el planeta. Un desafío gigantesco, que parece inalcanzable.

(*) Periodista 

jueves, 24 de julio de 2025

DIÁLOGO MINERO UN RETO NACIONAL

 

Por:Enrique Soto Roca (*) 

Mañana viernes 25 de julio, a pocos días de nuestro aniversario patrio, se vuelven a reunir en Palacio de Gobierno -para continuar con el diálogo iniciado hace dos semanas, que se prolongará por espacio de dos meses, según lo pactado, en base a una tregua- el Ejecutivo y los representantes de la Confederación Nacional de Pequeños Mineros y Mineros Artesanales (CONFEMIN-PERÚ), con el propósito de resolver agudas controversias que están generando conflictos sociales y lograr alcanzar un entendimiento sostenible y duradero entre las partes, en beneficio del  país. Sin embargo, según los analistas más entendidos en la materia, consideran, en base a la realidad -por la extrema complejidad del problema- que difícilmente se logre alcanzar un final feliz. Logrando el entendimiento y la comprensión. Manifestando que el sector extractivo peruano necesita actualmente una profunda reforma jurídica, que permita reordenar el mercado, integrando a la pequeña minería y minería artesanal, en una nueva circunstancia, en la que se desenvuelve la Industria Minera.

Hay que tener en consideración que la realidad evidente del quehacer extractivo minero ha cambiado radicalmente en los últimos 30 años, desde los inicios de la década del 90. Siendo imprescindible debatir seriamente lo que viene aconteciendo en la Industria Minera. En ese entonces -hace tres décadas- el Perú tenía, según reporte del Ministerio de Energía y Minas (MINEM), 2 millones 300 mil hectáreas concesionadas. En la actualidad tenemos aproximadamente 20 millones de hectáreas concesionadas. Siendo administradas por solo 50 grandes empresas, que el estado les adjudicó por un periodo de 30 años; siendo solamente trabajadas entre dos y tres millones, aproximadamente, de las hectáreas otorgadas, en exploración y explotación, estando el resto en total abandono.

Esta situación se debe observar con rigor, debatir sin apasionamientos y corregir con precisión, dentro del estado de derecho, promoviendo una nueva legislación, modificando o dando una nueva Ley General de Minería. Para, de tal manera, lograr incrementar la rentabilidad, y elevar la producción del sector, en favor de aumentar los ingresos fiscales, en beneficio del estado, y, por ende, de la sociedad en su conjunto. En la medida que han aparecido, con un crecimiento abrumador, nuevos actores competitivos en el mercado, que desean trabajar, lo que no se está trabajando.

Prueba de ello, es que ese sector, llamado informal, agremiado en la pequeña minería y minería artesanal, ha crecido vertiginosamente, en estos últimos treinta años, generando una producción de minerales superior a la que produce la gran minería formal, promoviendo una descompensación peligrosa en los ingresos fiscales, que el Estado está obligado a enmendar y corregir, para poder captar ese beneficio económico, a través de impuestos.

El 60% del total la producción de minerales -principalmente oro, plata y cobre- es generado por la pequeña minería y minería artesanal, moviendo alrededor de 12 mil millones de dólares anuales. Teniendo entendido que son más de un millón los pequeños productores mineros que se dedican a esta faena en todo el territorio nacional. Habiéndose incubado, en las ultimas décadas un problema económico y social, que hoy nos explota en la cara, debido a la enorme crecida constante de los precios de los commodities en el mercado mundial, por su gran demanda global, debido a la transición energética.

A pesar que CONFEMIN exige en la mesa de diálogo instalada, tres puntos cardinales, estratégicos y determinantes en defensa de sus intereses, habiendo logrado poner contra las cuerdas a un gobierno débil e incapaz, sin legitimidad social, planteando la reincorporación inmediata de los más de 50 mil mineros excluidos del REINFO, por considerar que ha sido una injusticia, al no habérsele participado un debido proceso; así como la suspensión de la interdicciones a los pequeños mineros con Reinfo agremiados, aduciendo que no se los deja trabajar; y la urgente promulgación, en esta legislatura, de la  Ley Mape. Consideramos, que estas legítimas exigencias, por parte de los mineros, no debe confundirse con bajar la guardia por parte del estado, en la lucha implacable contra la minería ilegal, que promueve el crimen organizado, la violencia, el terror y el vandalismo. Atentando contra la propiedad privada y el medio ambiente. Perpetrando la actividad minera en zonas prohibidas y vulnerables, poniendo en grave peligro los ecosistemas. Eso no lo debemos permitir. Actuando con firmeza para erradicarlos.

Finalmente, consideramos, que la situación que se va a vivir en torno a este singular problema minero, en los próximos meses, -antesala a las elecciones generales- van a ser complicadas. En tal sentido, el gobierno saliente, de la presidenta Dina Boluarte, va a tener que hilar fino, actuando con prudencia y ponderación, para no sufrir un desborde popular, que podría comprometer seriamente su existencia gubernamental. Teniendo en consideración que no tiene respaldo popular. Toda la ciudadanía la rechaza, queriendo ardientemente que se vaya lo más antes posible. El pueblo está harto con su presencia. Por eso en todas las presentaciones públicas termina mal parada, siendo abucheada.

Esto, muy bien lo saben lo dirigentes de CONFEMIN, teniendo una oportunidad a favor para negociar y dialogar con ventaja. Además, tienen un movimiento gremial bien organizado a nivel nacional, que realizan desplazamientos, plantones y movilizaciones estratégicas, que jaquean continuamente al gobierno. Y saben, asimismo, que son una fuerza social electoral, que podría determinar quién va hacer el futuro presidente de la nación en los próximos comicios generales. Con una influencia en más de 3 millones de electores.

Terminamos este análisis, creyendo sinceramente -coincidiendo con algunos analistas especializados- que esta legislatura congresal, que se instala en este mes de julio no va a lograr sacar adelante la Ley Mape. Abocándose, desde nuestro particular punto de vista, a debatir, más bien, una nueva prórroga del REINFO. Dejando el encargo al nuevo gobierno electo, y a las nuevas autoridades que asuman la representación nacional en el Congreso de República, en sus dos cámaras: Diputados y Senadores, que serán instaladas, a partir del 28 de julio del 2026. Ya que la resolución del problema es bastante delicado y comprometedor, habiéndose convertido en una papa caliente, que nadie la va a querer tocar.

(*) Periodista

jueves, 17 de julio de 2025

DIÁLOGO CON LOS PEQUEÑOS MINEROS

 


Por: Enrique Soto Roca (*)

Consideramos de suma importancia y trascendencia la instalación, el pasado lunes 14 de julio, de la mesa de diálogo, denominada mesa de trabajo técnica, con participación del Ejecutivo y la Confederación Nacional de Pequeños Mineros y Mineros Artesanales (CONFEMIN-PERÚ). Quienes inauguran un inicio de conversaciones en Palacio de Gobierno este viernes 18 de julio, por un espacio de tiempo continuo de 60 días. Lográndose, de tal manera, la recuperación de la tranquilidad pública en todo el país. Que venía siendo afectada dramáticamente con bloqueos de carreteras, plantones y movilizaciones que impedían el desplazamiento de vehículos de transporte de carga y de pasajeros, perjudicando gravemente el normal desenvolvimiento de las actividades económicas, en el interior del país, generando cuantiosas pérdidas.

El diálogo -lo sostendremos siempre- es una de las herramientas más contundente y efectiva que tienen los pueblos civilizados y democráticos, para alcanzar consensos unitarios en las diferencias que siempre existen en las comunidades. Con el propósito de alcanzar soluciones acertadas en los conflictos sociales que se presentan. Ayudándonos a promover la paz y la concordia que tanto anhelamos.

El problema que adolece la Pequeña Minería Y Minería Artesanal, con respecto al asunto de su formalización, no es algo reciente. Este tema se arrastra desde hace varias décadas. Y no solamente en el sector minero, sino en distintos sectores, dado que en el Perú más del 70% de la actividad económica es informal. Sin embargo, este problema de informalidad minera nos explotó en la cara, debido a los altos precios, que hoy en día, tienen los minerales, principalmente el oro, el cobre y la plata, por la gran demanda en el mercado internacional, debido a la transición energética global.

Es así como, el Ministro de Energía y Minas, Jorge Montero, con el propósito de acabar de una vez por todas con el Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), decidió extender por última vez, el plazo de formalización minera hasta el día 31 de diciembre del presente año. Excluyendo, asimismo, a través del Decreto Supremo 012-2025, a 50,565 mineros del registro, por mantenerse suspendidos por más de un año, sin mostrar interés en formalizarse. Esta decisión prendió la chispa que alborotó a los más de 500 mil productores de minerales asociados en la CONFEMIN, poniendo en alerta al Gobierno Nacional. Quienes se declararon en rebeldía, promoviendo un paro nacional indefinido, realizando movilizaciones y bloqueos de carreteras. Esto, sin embargo, ha sido controlado. Evitándose que el conflicto escale, en el mes de la patria. El gobierno ha tenido que ceder -aunque mínimamente- diciendo que los más de 50 mil mineros excluidos del REINFO, tienen un plazo de 15 días hábiles, para volver a reinscribirse, y así poder continuar con su formalización.

Sin embargo, la posición del comando de dirección del CONFEMIN, liderados por su presidente Máximo Franco Bequer, manifiestan que, para la reunión convocada, buscarán la modificación del Decreto Supremo que aparta del proceso de formalización, excluyendo, a más de 50 mil mineros, por considerarla injusta, ya que se ha dado sin cumplir los requisitos mínimos del debido proceso. Aseverando, que dicho dispositivo legal debe suspenderse hasta que se apruebe la Ley Mape. Asimismo, sostienen que deben paralizarse las interdicciones a socavones y campamentos. Que no los dejan trabajar.

Como podemos darnos cuenta la situación está bien caldeada. Bastante difícil de monitorear. Creemos, si no se maneja con diplomacia y bastante prudencia, la situación puede volver a cero, y empezar a escalar. Volviéndose incontenible, perjudicando la economía nacional, donde todos saldremos perdiendo.

En tal sentido, consideramos, que en las conversaciones semanales que se realizarán en Palacio de Gobierno, a lo largo de dos meses, y que empezarán este viernes, según lo acordado, se debe poner en primera instancia, los intereses de la nación, por encima de intereses particulares o de grupo. Con el principal deseo de deliberar que clase de minería queremos desarrollar en el país. Teniendo en consideración que somos un país minero. Cuidando principalmente - ¡que duda cave! - el medio ambiente, apuntando a la descarbonizacion del planeta, con la utilización de energías renovables. Considerando que es un sector estratégico que garantiza el crecimiento de nuestra economía, aportando el 15% del PBI, y contribuyendo con 65% del total de las exportaciones. Trayendo divisas.

Por otra parte, para que las conversaciones vayan por buen camino, es necesario determinar plazos perentorios para la formulación, debate y promulgación de la Ley Mape. Instrumento jurídico que permitirá ordenar el mercado dentro del estado de derecho. Dando un alcance definitivo del combate contra la minería ilegal, que debe ser perseguida y exterminada. Impidiendo con la ley en la mano, que estos delincuentes se camuflen en la minería informal y la utilicen como escudo. Ya que es muy importante saber distinguir entre la minería informal, de la minería ilegal (léase criminal).

(*) Periodista

lunes, 7 de julio de 2025

MINERÍA Y AGRICULTURA, ACTIVIDADES COMPLEMENTARIAS (**)

 


(**) Extracto del Quinto Capítulo del libro en proceso de redacción: «MÁS ALLÁ DEL SOCAVÓN»

Se ha sostenido -sin fundamento sólido y científico razonable, de manera irresponsable-  a lo largo de muchos años, y con mayor énfasis en los últimos tiempos, narrativas -con el propósito de confundir a la población- que el desarrollo del quehacer minero es incompatible con la agricultura; nada más incierto. Sosteniéndose -asimismo- que estas dos actividades económicas son contrapuestas, siendo imposible que puedan sobrevivir juntas en armonía, ayudándose mutuamente, de manera complementaria; es decir, desarrollándose unidas; declarándolas –ipso facto- enemigas irreconciliables una de la otra. ¡Qué tal mentira! ¡Qué ignominia! Algo totalmente absurdo, que contradice las leyes de la naturaleza.





viernes, 27 de junio de 2025

APROVECHAR POTENCIAL GEOLÓGICO MINERO

 


Por: Enrique Soto Roca (*)

El Perú, con su enorme potencial geológico minero -en el momento actual-tiene en sus manos una brillante oportunidad histórica que le ofrece el mercado global; para poder consolidarse como un país importante, de gran trascendencia, productor de minerales. Siendo capaz de desarrollar e implementar en el país, un plan estratégico competitivo que le permita atraer, para el sector extractivo, grandes capitales del mercado financiero internacional. Pudiendo garantizar y contribuir, de tal manera, con la transición energética imprescindible, que se viene promoviendo en el mundo, con el propósito de lograr la descarbonización del planeta.

GIGANTESCOS DEPÓSITOS DE MINERALES

Nuestro país, es una nación clave, para el desarrollo y crecimiento de la industria minera global. ¡Qué duda cabe! Contamos, para ello, en el sur de nuestro territorio, -según información difundida por el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (INGEMMET)- con sistemas porfiríticos de cobre y molibdeno. Gigantescos depósitos de minerales, formados hace millones de años, cuando el magma ascendía por grietas profundas de la corteza terrestre. Representando en la actualidad, más del 75% del cobre que se produce en todo el mundo. Algo extraordinario que debe ser aprovechado, de manera eficiente y planificada; para de esa forma lograr reactivar el crecimiento y desarrollo de nuestra minería; ya que en los últimos años se observa un proceso de estancamiento y ralentización, en el quehacer productivo metálico. Debido a la falta de interés -por parte de nuestros gobernantes- de promover e estimular la inversión minera, a través de la exploración y explotación de nuevos proyectos que están a la espera para ser ejecutados.

En tal sentido, la importancia de nuestro país, en el mundo, como productor de minerales, no solo es económico, sino estratégico. Siendo el cobre un mineral crítico esencial; como otros minerales imprescindibles, que vienen siendo demandados por el mercado global para la transición energética; para la fabricación de vehículos eléctricos, utilizado, también, en los aerogeneradores de redes eléctricas inteligentes y en los paneles solares. Tal es así, que se tiene conocimiento que, de los 15 minerales críticos, estratégicos, que necesita el mundo, 8 los produce el Perú, como el níquel, el grafito, el cobalto, zinc, plomo, germanio, antimonio, indio y telurio.

Teniendo entendido que los minerales estratégicos son fundamentales para garantizar la autosuficiencia de un país en sectores claves, reduciendo la dependencia de otros países productores. Permitiendo impulsar la innovación y el desarrollo de nueva tecnología, de allí la necesidad de desarrollar la industria nacional, en nuestro país, incorporando valor agregado a nuestros productos primarios.

PERÚ, PAÍS MINERO

Asimismo, es necesario saber, que las reservas de muchos minerales estratégicos están concentradas en pocos países en el mundo. El Perú, es uno de ellos. Allí es donde radica nuestra importancia estratégica global. Siendo la gestión sostenible de los recursos minerales críticos un desafío clave para los países y la comunidad internacional.

Estos depósitos de minerales que existen en el país, en las profundidades de nuestra cordillera de los andes, no son fáciles de ubicar a simple vista. A pesar que existen en abundancia, en las alturas de nuestra serranía. Actualmente, la industria minera moderna, exige un trabajo riguroso, donde los geólogos -entendidos en la materia- que realizan tareas de exploración, deben combinar la ciencia con la tecnología de vanguardia, que incluye mapas geológicos, geoquímica, inteligencia artificial, modelos 3D, teledetección y análisis estructurales que ayudan a ubicar esos tesoros almacenados subterráneamente.

Teniendo entendido que, nuestro país, cuenta con una cordillera andina rica en rocas volcánicas y plutónicas, una larga tradición minera, estabilidad geológica, infraestructura en expansión y demanda mundial asegurada. Sin embargo, aún no somos capaces de sacarle el mayor provecho a esta oportunidad que nos está dando el mercado global. Siendo indiferentes, al no ponerle la debida atención a la exploración minera, teniendo solamente en producción proyectos antiguos, que nos permiten mantener el mercado, y otros proyectos en espera de iniciar proceso de construcción y explotación. Habiéndose contraído la inversión privada en el sector, que no supera anualmente los 4 mil millones de dólares, en promedio, anualmente, en los últimos años. Habiendo sido en los mejores tiempos de crecimiento continuo de 8 mil y 9 mil millones de dólares la inversión privada anual en el sector extractivo. ¿Qué está pasando en la industria minera en el Perú? ¿Estamos perdiendo la audacia de pensar en grande?

UNA CARTERA DE 64 MIL MILLONES DE DÓLARES

Creemos que es necesario retomar el interés en querer desarrollar la industria minera en el país como debe ser. Sacándole provecho al potencial geológico que tenemos. Teniendo en consideración que debemos apretar el acelerador para sacar adelante a los 67 proyectos mineros que tenemos en cartera, actualmente, por un valor de inversión estimada en 64,100 millones de dólares. Y recuperar el segundo puesto, como productores de cobre en el mundo, que teníamos hace dos años, y nos fue arrebatado por la República Democrática del Congo. Desplazándonos al tercer puesto. Situación que debe ser reivindicada. Tenemos las condiciones suficientes para poder lograrlo.

Por otra parte, consideramos, que podemos reafirmar, nuestro posesionamiento en el mundo, como país líder en minería, si resolvemos rápidamente nuestros lentos procesos regulatorios, que retrasan los permisos y las licencias. Entorpeciendo el avance de la implementación de los proyectos, que pretenden explorar y explotar yacimientos, con trámites ágiles y rápidos. Incentivando, de tal manera, la inversión privada nacional e internacional.

Asimismo, se debe desarrollar un trabajo sostenido para erradicar de manera definitiva a la minería ilegal, que viene haciendo tanto daño al sector extractivo, generando terror y muerte en los socavones; comprometiendo seriamente a los pequeños mineros y mineros artesanales, en proceso de formalización. Por lo que se hace urgente la elaboración y promulgación de la ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala. Ley MAPE. Generándose, de tal manera, una consistencia jurídica de manera integral en el sector. Validándose el Estado de Derecho en el país.

Finalmente, es de suma importancia, darle un trato adecuado, justo y coherente. Con total transparencia, implementando un diálogo permanente, a los conflictos sociales mineros, que se suscitan en las comunidades de influencia minera. Siendo un trabajo complejo y de responsabilidad tripartita. Donde deben participar activamente las empresas mineras, las comunidades y el Estado. Tratando de hallar las soluciones más racionales y acertadas, que permitan una convivencia pacífica. Tratando de que todos sean partícipes de los beneficios, con un reparto justo y equitativo. Teniendo como prioridad la protección del medio ambiente, sin lugar a dudas. Garantizando la integridad del ecosistema.

(*) Periodista 

jueves, 19 de junio de 2025

PEQUEÑA MINERÍA Y MINERÍA ARTESANAL ¡FORMALIZACIÓN URGENTE!

 


Por: Enrique Soto Roca (*)

El pasado 15 de junio, el presidente del Congreso Eduardo Salhuana, dio por finalizada, la segunda legislatura ordinaria, correspondiente al Periodo Anual de Sesiones 2024-2025; anunciando la convocatoria a la instalación de la Comisión Permanente, de Junta de Portavoces. No habiéndose podido lograr debatir y aprobar -después de constantes suspensiones- en la Comisión de Energía y Minas del Parlamento, presidida por el congresista Paul Gutiérrez Ticona, el pre-dictamen de la Ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala(MAPE). Habiendo podido pasar y quedar lista (esta nueva propuesta de ley) para su debate y aprobación definitiva en el Pleno del Congreso de la próxima legislatura. Sin embargo, esto no ha sucedido; siendo el deseo urgente -por parte del Ejecutivo- de que se tenga una ley MAPE, antes de que finalice el año 2025, ya que el 31 de diciembre del 2025 debería de finiquitar el Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), que fue una opción transitoria -que permitió manejar la informalidad del sector- desde el 2012. Sin embargo, tal con van las cosas, para los entendidos en la materia, esta meta, continuará siendo una ilusión peligrosa para el Estado peruano.

MINERÍA INFORMAL MUEVE 11 MIL MILLONES DE DÓLARES

Consideramos que la promoción -por parte del Estado peruano- de la formalización de la Pequeña Minería y Minería Artesanal, actividad desarrollada en todo el territorio nacional por alrededor de un millón de productores informales que existen en el país;  y mueven alrededor de 11 mil millones de dólares, produciendo el 60 % del total de producción anual de minerales en el país, (estando la mayoría de ellos organizados gremialmente en la Confederación Nacional de Pequeños Mineros y Mineros Artesanales del Perú. CONFEMIN-PERU) es una necesidad estratégica, que ayudaría significativamente a dar estabilidad y sostenimiento a la Industria Minera en general en el Perú de manera integral. Garantizando el desarrollo y crecimiento económico de las fuerzas productivas que sostienen la nación. Más aún, si esta formalización, se realiza de manera planificada, coherente y con justicia social. Como debería ser. Con la participación de todos los actores involucrados. Teniendo en consideración, que este vasto sector social y económico ha estado durante décadas abandonado; excluido en su desarrollo, promoción y protección por parte del Estado, partiendo de allí los continuos desencuentros (léase conflictos sociales), al sentirse apartados; actuando por su cuenta al margen del Estado de Derecho. Sin ajustarse a la ley, el reglamento y la norma jurídica. Habiendo llegado el momento oportuno e histórico, de promover políticas de inclusión social minera, que exigen las actuales circunstancias, permitiéndonos, dichas actitudes, asimismo, fortalecer nuestra democracia y nuestras instituciones tutelares, soportes seguros de una sociedad competitiva y civilizada.

¿QUIÉN ES PEQUEÑO MINERO Y MINERO ARTESANAL?

Es necesario precisar, para contextualizar la situación: ¿Quién es considerado pequeño minero? Aquel productor de minerales que posee denuncios, petitorios, concesiones mineras, y/o tiene suscritos acuerdos o contratos con titulares, no mayor a 2,000 hectáreas. Asimismo, debe tener una capacidad instalada de producción y/o beneficio de hasta 350 toneladas métricas por día. Siendo diferente su situación la de un Minero Artesanal; quien es considerado como tal, cuando posee hasta 1,000 hectáreas, y su capacidad productiva instalada, no supera las 25 toneladas métricas al día. Según lo establecido por el Reglamento de Ley General de Minería.

Este retraso significativo que estamos viendo, con respecto al avance y desarrollo de la Ley MAPE- ya que estamos en una carrera contra el tiempo- se debe a intereses contrapuestos de sectores interesados que no logran conciliar objetivos comunes, que impiden lograr alcanzar consenso. Sin embargo, los que de verdad desean incorporarse a la formalidad son conscientes que están en la obligación de arribar a entendimientos justos y necesarios, que permitirá ordenar de manera definitiva y para siempre el sector. Estando el Estado, en la obligación técnica y política de facilitar la transición, con el propósito de incrementar la recaudación fiscal, ampliando y ordenando el mercado. Asimismo, lograr la pacificación, controlando y disminuyendo la violencia, promovida por organizaciones criminales que han invadido la industria minera, a través de la pequeña minería y minería artesanal, pretendiéndose confundir con los productores informales. E allí la diferenciación categórica que debemos hacer, con precisión matemática, de productores informales, de saqueadores ilegales (léase delincuentes). Habiendo estos últimos penetrado a las instituciones tutelares del Estado peruano en base al poder económico, con sobornos; comprando conciencias de malas autoridades.

LA TRAZABILIDAD FACTOR DETERMINANTE

En tal sentido, el imperio y la práctica de la trazabilidad es determinante y necesaria. Siendo imprescindible para garantizar la legalidad, la transparencia y sostenibilidad de la actividad minera; rastrear el origen y la trayectoria de los minerales a lo largo de toda la cadena de suministros. Es decir, desde la mina (donde se produce) hasta el producto final (donde se vende). Todo ello incluye registrar y controlar cada etapa de producción, procesamiento, transporte y comercialización. Esto es lo que se pretende realizar con rigor en Pataz, a partir de ultimo acto criminal registrado en un socavón, donde 13 trabajadores fueron vilmente asesinados por bandas criminales.

Hay que tener en consideración que la actividad minera informal en el país no es un problema económico y social reciente, sino que es un subproducto de la informalidad generalizada que padece el país en su conjunto en diversos sectores productivos, desde hace varias décadas, que sobrepasa el 70%. Debido a que tenemos instituciones débiles, incapaces de ejercer supervisión y aplicación de la ley. Además, por la escasa y limitada producción de empleo en el mercado laboral formal. Asimismo, no hay incentivos para la formalización, siendo complejos y costosos los procesos. En tal sentido, somos un país informal, que requiere reformas profundas y una reestructuración. Lo que sucede es que en el sector minero escaló de manera escandalosa, con el alza continua del precio internacional del oro, que promovió la ambición desmedida y la intromisión delincuencial de organizaciones criminales transnacionales, que han empezado a generar terror y muerte; promoviendo trata de personas, sicariato, extorsión, homicidio, robo de tierras, invasiones, evasión tributaria y lavado de activos. Es decir, la situación se complicó. Principalmente en la minería, constituyéndose en un problema extremadamente complejo, que necesita soluciones inteligentes y sabias.

INCLUSIÓN SOCIAL MINERA

Finalmente, sostenemos, que la formalización minera de la Pequeña Minería y Minería Artesanal, que está en marcha; tendrá sostenibilidad cuando el Estado peruano asuma la responsabilidad de desarrollar políticas públicas de inclusión social minera, que deberán avizorarse en la Ley MAPE, debiendo el país hacer un esfuerzo monumental para que se apruebe y promulgue este año 2025.

Cuando nos referimos a políticas públicas mineras de inclusión social, nos referimos al desarrollo del apoyo integral, a la producción y el desarrollo de la Minería Artesanal y de Pequeña Escala, apoyándola no solo financieramente, otorgando líneas de créditos a través del Banco del Nación, con bajas tasas de interés; sino también, promoviendo la capacitación y calificación de los recursos humanos; incentivando la investigación y el desarrollo tecnológico, trabajando de la mano con la academia; así como, promoviendo la comercialización y la búsqueda y ampliación de mercados. Desarrollando infraestructura, instalaciones de agua potable y alcantarillado, luz eléctrica, como también, construyendo vías de comunicación, carreteras, que optimice la interconexión. Promoviendo la inversión pública y privada en las zonas de influencia minera, levantando escuelas y hospitales. Promoviendo y garantizando la educación y la salud de calidad a mediano y largo plazo. Es decir, elevando la calidad de vida de la población.  Actuando de tal manera, garantizaremos la sostenibilidad del quehacer minero y su desarrollo en el futuro, asegurando una minería limpia, disminuyendo -con uso de la tecnología- impactos negativos medios ambientales, protegiendo y cuidando los ecosistemas.

(*) Periodista