jueves, 24 de abril de 2025

NUEVO ORDEN ECONÓMICO MUNDIAL EN MARCHA

 

Por: Enrique Soto Roca (*)

La guerra comercial arancelaria promovida por el gobierno norteamericano, comandado por el presidente Donald Trump, no solamente ha creado incertidumbre, inquietud y zozobra en el mercado global; sino que ha permitido poner de manifiesto, poniéndose al descubierto abiertamente, que un Nuevo Orden Económico Mundial está en marcha. Debido a que el mercado internacional ya no es el mismo que el de hace 30 años atrás; donde tras la caída de la Unión Soviética en 1991, no había un solo país en el mundo que pudiera competir con EEUU de Norteamérica. Generándose una unipolaridad, que permitió impulsar con singular fuerza y vehemencia la globalización, la integración, el libre mercado, los Tratados de Libre Comercio, la competitividad y la división internacional del trabajo. Esa era la ideología económica y política de ese entonces. Metas y objetivos que actualmente están siendo dejados de lado, siendo reemplazados por el proteccionismo y el nacionalismo, con la aparición de nuevas naciones emergentes desarrolladas y prósperas, que disputan la hegemonía y control global del mercado.

Las naciones avanzadas en el mundo se oponen a aceptar y seguir las reglas de juego que existían y regulaban el mercado internacional en décadas pasadas. Argumentando subrepticiamente que estas les perjudican su desarrollo como nación. Empezando a implementar políticas proteccionistas, alentando y promoviendo el nacionalismo. Generando un desconcierto en el comercio mundial, dificultando la promoción del intercambio global de bienes y servicios entre los pueblos y comunidades que existen en este planeta.

Por lo que el Fondo Monetario Internacional, en su último informe, anuncia, que se está viviendo el inicio de una nueva era para la economía mundial, que está poniendo fin al régimen de globalización. Manifestando, que «los aranceles dañan a todos los países», reducen el crecimiento, la inversión e innovación, promoviendo la caída del precio del petróleo, dólar y bolsas financieras.

El arancel efectivo, que ha puesto EEUU. a las importaciones es superior al que se impuso en la Gran Depresión de 1930.

Considerando que, la subida de los aranceles, es una medida desesperada del gobierno republicano norteamericano, que en vez de ayudar a salir de su situación de crisis económica y política en la que se encuentra, contribuye a profundizarla. Entendiendo que sus índices macro-económicos, como su endeudamiento, que se ubica por encima de su Producto Interno Bruto (PIB), superando los 130%, amenaza presentarse como impagable; así como su abultado e inmanejable déficit fiscal, mantenido durante varios años; han promovido una desaceleración en el crecimiento de su economía. Creando desajustes y desequilibrios, que alientan la inflación y la recesión, males cancerígenos para la economía de una nación. Pretendiendo equivocadamente que, con un shock arancelario, van a lograr revertir su déficit de la Balanza Comercial, y recuperar al país de la crisis en la que se encuentra sumergido. Olvidando que los aranceles constituyen -según la teoría económica- un shock negativo de oferta para la economía que los impone.  Creyendo, que los males que padecen vienen de afuera, no aceptando realistamente, que son producidos en su interior; debido a la implementación de gestiones gubernamentales deficientes de políticas macroeconómicas, a lo largo de las últimas décadas.

No considerando lo que recomienda Perre-Olivier Gourinchas, economista y Consejero Económico y Director del Departamento de Estudios del FMI, quien sostiene que «las perspectivas de crecimiento de las naciones podrían mejorar de forma inmediata si los países relajan su actual postura comercial y se esfuerzan en forjar nuevos acuerdos», («La Economía Global entra en una nueva era»).

Estamos viviendo una coyuntura extremadamente crítica y difícil, que ahuyenta las inversiones en el mercado global, estimulando la incertidumbre y el escepticismo. Promoviendo el desempleo, factor cardinal que desincentiva el consumo en todas las naciones, empujándonos hacia una recesión mundial. Golpeando tremendamente la calidad de vida de todos los seres humanos que habitamos este planeta. Impidiéndonos el progreso y bienestar.

En tal sentido, el FMI, ha realizado un ajuste en su proyección de crecimiento global para este año 2025, de 3.3% que venía considerando a 2.8%. Asimismo, proyecta un crecimiento para este mismo año de 1.8% para EEUU y 4% para China. En tanto a la Eurozona le otorga un crecimiento de 0.8%.

Sin embargo, «pese a la desaceleración que se está registrando, el crecimiento mundial se mantiene muy por encima de los niveles de recesión», sostiene el FMI.

Esto no impide que el comercio mundial se proyecte a la baja, disminuyendo la actividad, mientras EEUU. y China sigan enfrentados en una guerra comercial arancelaria. No arribando a un entendimiento de armonía y convivencia. Actuando con prudencia, procediendo a sentarse diplomáticamente a revisar y proponer acuerdos. Actitud con la que todos saldríamos ganando. Estando convencidos que, a través de la cooperación mutua, implementadas a través del diálogo civilizado, se resolverán todos los conflictos, alcanzando una paz duradera y sostenible. Reconociendo la nueva realidad actual que se está viviendo, totalmente distinta a la que existía hace tres décadas. Dando inicio a la estructuración de un Nuevo Orden Económico Mundial, que debe tener como fundamento la cooperación.

(*) Periodista

lunes, 14 de abril de 2025

EL ORO ROJO

 

Por: Enrique Soto Roca (*)

La guerra comercial global arancelaria motivada por el gobierno de EEUU, conducido por Donald Trump, contra, principalmente, China y, el resto del mundo, ha generado un desconcierto de grandes proporciones que puede provocar una recesión global; afectando las inversiones en la industria minera; creando incertidumbre innecesaria en la producción y comercialización del cobre, mineral estratégico, de gran demanda en la actualidad para  la transición energética, la descarbonizacion del planeta y la industria automotriz eléctrica. Siendo necesario -para no afectar el mundo- calmar las aguas. Asumir un postura reflexiva y racional, reconociendo la nueva realidad económica, política y social en la que vivimos actualmente. Aceptando la competencia, el libre mercado y la multipolaridad. Reconociendo que hay nuevas naciones en el mundo que han crecido, fortalecido y desarrollado, y son competitivas. Resolviendo los reveses y las diferencias que puedan haber, a través de la diplomacia, de tal forma que todos salgamos ganando.

Esta situación anómala -provocada por las potencias, en conflicto, con el propósito de ganar hegemonía en el mundo- ha puesto en entredicho la situación del futuro del cobre, conocido actualmente como el oro rojo. Un metal de gran valía. Coyuntura que merece un análisis profundo para tratar de aclararnos la confusión a la que estamos siendo empujados, queriendo crear incertidumbre.  Vayamos por partes, entendiendo gradualmente lo que está sucediendo.

El cobre es un metal estratégico que va ayudar a garantizar la transición energética, necesaria para construir la nueva matriz industrial en el planeta, que se moverá en el futuro con energía renovable, dejando atrás las energías fósiles contaminantes; descarbonizando el orbe. Siendo un metal altamente demandado por las tecnologías verdes, con el imperio de la modernización de las infraestructuras en distintos países del mundo. Entendiendo, con visión estratégica, los signos de nuestros tiempos, sostenemos que la mayor demanda de este precioso mineral va a estar en la producción masiva de vehículos eléctricos, que van a inundar el planeta. Considerando que la fabricación de un coche eléctrico consume cuatro veces más cobre que la fabricación de un vehículo a combustión. Teniendo en cuenta, asimismo, que América Latina sigue siendo la región con mayor producción de cobre en el mundo. Y dentro de ella Perú y Chile lideran la producción, representando el 40% del suministro global.

LA FÁBRICA DE COCHES ELÉCTRICOS MAS GRANDE DEL MUNDO

En esa dirección la empresa asiática BYD viene construyendo en Zhengzhou (China) la fábrica más grande del mundo, productora de vehículos eléctricos, en una extensión territorial superior a la que ocupa la ciudad española de Barcelona. Proyectando emplear, en los próximos meses, 200 mil trabajadores, que se sumarán a los 60 mil que actualmente tiene. Tratando de replicar a la ciudad alemana de Wolfsburg, la cual se desarrolló alrededor de la producción de Volkswagen. Actualmente la producción de la firma BYD alcanza los 400 mil coches eléctricos por año. Esperando triplicar su producción en los años venideros. Con la garantía de poderlos recargar en 5 minutos para recorrer 400 Km. Con la creación de un dispositivo tecnológico altamente avanzado. Lo que normalmente se realiza en 8 horas.

Esta actividad fabril automotriz, sumada con otros fabricantes de gran escala global, estimulará la demanda del oro rojo de manera impresionante en los próximos años. Pensando, que haya recesión global, el gigante asiático no va dejar de producir, y, por tanto, comprar cobre. En el extremo, consideramos que habrá una leve desaceleración. Teniendo en consideración que China compra el 50% de la producción total del cobre. Y tiene poderosas espaldas financieras, para mantenerse activo en el mercado.

Eso no significa que los aranceles impuestos por EEUU a China no afecten su economía. Lo que decimos es que tiene capacidad, para resistir, las crisis que le puedan generar en esa confrontación comercial.

PRECIO DEL COBRE TIENDE AL ALZA, A MEDIANO Y LARGO PLAZO

Por otra parte, sostenemos que la caída del precio que se observó en el mercado días pasados, fue meramente especulativa, por esta coyuntura de guerra arancelaria, que también movió los cimientos de las principales bolsas, como la de Nueva York, Londres y Tokio. Esto se revirtió rápidamente porque China empezó a comprar aprovechando los precios bajos. Ya que ellos tienen condiciones financieras para actuar rápidamente en estas circunstancias; aprovechando oportunidades. No hay que subestimar que los asiáticos son grandes negociantes. No en vano dijo Napoleón en su época: «China es un gigante dormido, cuando despierte moverá el mundo».

Asimismo, líderes globales debaten el futuro sostenible de la minería del cobre en el Word Copper Conference 2025, en Santiago de Chile, sosteniendo que «el precio del cobre podría sufrir una caída, aunque no se prevé que sea prolongada». Demandando desarrollar estrategias para aumentar la producción del oro rojo, ante la creciente demanda global. Ya que están seguros, como nosotros lo señalamos líneas arriba, el gigante asiático no va a parar de comprar. Estimándose, en el largo plazo, que la demanda global del cobre será, por parte de China, del 70% de la demanda mundial. Siguiéndole en ese camino la India, otro país emergente, que avanza como una locomotora en el mundo, decidido a conquistarlo. Ya ingresó con fuerza en Argentina, para llevarse el litio. Como podremos darnos cuenta el mundo ha ingresado, avanzando velozmente sin retroceso, a una vorágine de desarrollo e innovación imparable, ya no es el mismo de hace 30 años. El desarrollo tecnológico avanzado, -como sostiene Klaus Schwab, presidente del Foro Económico Mundial de Davos, en su libro: «La cuarta Revolución Industrial»- ha promovido la cuarta revolución industrial. Esta será imparable, continua y permanente; cambiará radicalmente nuestro modo de vida.

Entendemos, por otro lado, que «el control de la producción del cobre en el siglo XXI no es solo cuestión de geología, sino también de tecnología, diplomacia y poder industrial»- sostiene el analista minero Juan Lira Cacho.

PRODUCCIÓN DEL COBRE SE RECUPERA EN PERÚ

En esa perspectiva la industria minera peruana debe seguir trabajando con gran decisión por tratar de recuperar su segundo puesto como productor de cobre en el mundo. Teniendo en consideración que la ubicación de la República Democrática del Congo, en el segundo puesto es algo efímero, sin capacidad de sostenimiento. Ya que no tiene las condiciones con la que cuenta nuestro país, con un potencial minero extraordinario. Habiendo la necesidad de hacer algunos ajustes estructurales, por parte del estado peruano, para incentivar la inversión, y promover la producción, alentando la exploración y explotación del mineral rojo. Acelerando los permisos y las licencias para operar. Ayudando a destrabar grandes proyectos estratégicos que están paralizados, como Tía María y Michiquillay.

Asimismo, hay que tener en cuenta que grandes empresas mineras, que mueven ingentes capitales, están exigiendo al Perú, estabilidad política, debido a las continuas confrontaciones entre poderes del Estado, que promueven la incertidumbre. Así como, pulir y precisar la seguridad jurídica. Acelerar los permisos y licencias de operaciones. Como acabar con la minería ilegal y disminuir significativamente la minería informal. Sin embargo, hay que aplaudir que el primer mes de este año 2025, la minería en el Perú ha registrado un crecimiento significativo en la producción de cobre, en comparación al mismo periodo del año anterior. Eso es algo positivo, una buena señal, en una coyuntura llena de incertidumbre y escepticismo.

(*) Periodista