domingo, 25 de agosto de 2019

ENCUENTROS CERCANOS

MARTÍN VIZCARRA Y PEDRO OLAECHEA

Por: Enrique Soto

Con el propósito de encontrar una salida negociada, a la situación de crisis política e ingobernabilidad que padece el país, promovida por el fujimorismo, con su mayoría absoluta, desde el Congreso, esta semana se reunirán en palacio de gobierno, el presidente Martín Vizcarra y Pedro Olaechea, en su condición de presidente del parlamento.

Este encuentro ha generado expectativas en algunos sectores de la población, pero quienes somos escépticos, en base a un seguimiento, que le estamos haciendo a los sucesos políticos del país, consideramos, que dicha reunión no servirá de nada. Y mas aún creemos que es parte de la estrategia dilatoria, que viene desarrollando el fujimorismo, para que no haya una reforma constitucional que garantice un adelanto de elecciones, con referéndum. En tal sentido, el presidente Vizcarra, debe de estar advertido de esta maniobra política, al haber aceptado dicha reunión.



Lo que pretende el fujimorismo, con su mayoría en el Congreso, es salirse con la suya, para así encubrir a los corruptos y evitar que vayan a la cárcel. Por eso va a impedir a toda costa, que no haya adelanto de elecciones, promoviendo bajo la mesa, con sus aliados incondicionales, vacar al presidente, llegar a acuerdos con la vicepresidenta, Mercedes Aráoz, y así tener el poder hegemónico de todo el estado. Ya que la lucha contra la corrupción emprendida por Vizcarra “caiga quien caiga” es una amenaza peligrosa a su supervivencia. El fujimorismo tiende a desaparecer.

Al ser vacado Vizcarra, y en caso no se llegue a un acuerdo satisfactorio con Mercedes Aráoz, pondrían a Pedro Olaechea, como presidente de transición, y en el periodo que dure su mandato, este tendría la tarea obligatoria de lavar los trapos sucios, tratando de impedir que los delincuentes vayan a la cárcel.
Por eso, sostenemos, no pedir peras al olmo.

Ellos no piensan en el bienestar común, en el bien del país, en el bien de la república, que estamos a portas de celebrar el bicentenario. Ellos piensan en sus bolsillos, en sus intereses particulares y de grupo. En tal sentido, hay que tener en claro la situación para la toma de decisiones. Vizcarra, tiene una gran tarea por delante, si quiere ser registrado por la historia. Tiene que actuar con mano firme, e impedir que le adelanten la iniciativa. “Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”, dice el dicho popular, y es bien cierto.

Por eso es de suma importancia, seguir apuntando la propuesta, con mayor determinación, sobre el adelanto de elecciones generales, con referéndum, protegida con una reforma constitucional, promovida por el ejecutivo, y que ahora debe hacerla suya, la comunidad organizada en colectivos sociales. Eso es democracia, participativa, donde el pueblo manda, y promueve sus reformas de gobierno.

Esta crisis política, la estamos padeciendo, desde el 2016, cuando el fujimorismo, perdió la presidencia de la república, y hasta ahora no quiere aceptarlo. Ya nos advirtió Keiko Fujimori, cuando anunció: “Gobernaremos desde el Congreso”, dando realce a su mayoría absoluta. Esto es una aberración jurídica. El parlamento no gobierna. Solo legisla y fiscaliza. No es ejecutivo. No maneja presupuesto. Pero ellos no quieren entender, y siguen con la sangre en el ojo.

Dentro de esa realidad, el Ejecutivo, debe evitar, con la Constitución en la mano, que el presidente Vizcarra, sea vacado. Eso no se lo debemos permitir. Por eso sostenemos, con firmeza y precisión, que antes que ello ocurra, el Congreso de la República, debe ser cerrado, convocando inmediatamente a nuevas elecciones.

La situación está sumamente difícil y no da para mas.

En los próximos treinta días, esta debe estar finiquitada. Ya que la economía ha empezado a languidecer. Las inversiones se han empezado a contraer; el consumo interno ha empezado a disminuir, así como el desempleo está aumentando, producto de la incertidumbre. Ya se está anunciando que este año no creceremos un 3.5% como se creía a inicios, solo creceremos 2.5%, ya que también estamos siendo golpeados por la crisis global, generada por el enfrentamiento comercial de EE.UU. con China.

Por lo expuesto, en estos momentos, solo hay dos alternativas para resolver la crisis política que padecemos: El primero; adelanto de elecciones generales, vía referéndum (previa reforma constitucional) o segundo; cerrar el Congreso de la República, y convocar inmediatamente a nuevas elecciones. Y esto último es lo que mas exige, a gritos, el pueblo peruano mayoritariamente. ¡Hagámosle caso! Eso es democracia.